Señor López, Don José Alberto, entrenador del Real Racing Club, nuestro querido representativo ¿Cómo después de lograr un record histórico, el de ganar el mayor número de partidos consecutivos fuera de casa?; De haber llegado a tener diez puntos de diferencia para el ascenso directo, ocupando además puesto de líder, ¿ Se puede estar en esta situación desastrosa?. Si desastrosa, a pesar de solo necesitar un empate para poder jugar, al menos, el play off.
Lo primero y posiblemente más importante, un equipo sin rumbo, prácticamente en todas sus líneas. La defensa un “coladero”; los tres goles del Eldense, ya descendido, última “paparda”, reflejo de muchísimos encuentros anteriores. Ya ni Jokin Ezquieta, con grandes fallos, ante Oviedo y en Elda, puede servir de apagafuegos. El centro del Campo y con defensa adelantada, hace tiempo que los contrarios se han enterado, marcándonos a placer. Mientras usted sigue con eso de “Sosteneya y no emendaya”. La verdad es que nunca pensé que íbamos a echar tanto de menos “Al Capi” Iñigo Sainzmaza, cortando el juego de los rivales, lanzando el equipo hacia adelante. Vencedor, tan buen jugador, ha ido a menos escandalosamente. Aldasoro, irregular toda la temporada, Siendo Maget el único con esa regularidad deseada, aunque su juventud y arrojo le hace recibir más tarjetas, que en un tarjetero de pésame. A lo que hay que unir, uno de los mayores fracasos en contratación de jugadores, Meseguer, con todavía el síndrome Valladolid, de esta temporada. Lo único salvable, a pesar de perder muchos enteros es la delantera. Tenemos la baja forma durante varias jornadas de Vicente y Juan Carlos Arana; la tardanza en marcar de Karrikaburu; su incompresible actitud con Pablo Rodríguez, que cuando mejor resultado da, usted le saca de la alineación. Así y con todo la línea mejor, con un Andrés inmenso y un Sangali, en cualquier puesto ejemplo de pundonor. En lo que a buen seguro ponemos, nuestras pocas esperanzas, ni siquiera de jugar la promoción de acenso, con solo la necesidad de un empate, es en la suerte, muchísima suerte. Fíjese si el Almería, cosa poco probable, no consigue la victoria ante el Tenerife, en su casa, en esta cita final del Campeonato, no necesitaríamos puntuar con el Granada, colocándonos en la sexta posición.
JAL, pensará usted, que estoy decepcionado, sí que lo estoy. Lo peor del caso, es la cantidad de aficionados sufriendo lo mismo. Lo de este pasado domingo en el Elda, le culpabiliza de todos los males. Siempre a remolque en el resultado, hasta que casi al final logramos adelantarnos, para finalizar con un nuevo fallo defensivo, pasado el minuto cien. ¿Cómo en un partido vital saca de salida, una alineación de circunstancias, dejando a muchos de sus jugadores importantes en el banquillo?. Cuando se ganaba en las postrimerías, en vez de sacar defensas, Manu, Pol Moreno o Montero, si es que no había algún otro donde elegir, para aguantar un resultado positivo; saca Geremi y a Ekain, ambos fichados como delanteros. Con un plano de TV, del jugador del Eldense, que marco el gol del empate final, con los ojos enramados, llenos de lágrimas, al darse cuenta de la imposibilidad de salvación. Tal desastre es imputable, al menos en un 90 % a sus criterios. Tanto este pasado Domingo, así como en otras jornadas precedentes.
Con respecto a ese Racing versus Granada, de final de temporada, donde tan solo es necesario el empate, para no irnos de vacío, yo personalmente creo ¡Y ya es creer! Que el Tenerife pueda, cuando menos, empatar al titular de Estadio de Los Juegos del Mediterráneo, consiguiendo la clasificación para los racinguistas. Hay que tener en cuenta que los de La Alhambra, con Pacheta de entrenador, dos jornadas en el banquillo, dos victorias; posee una de la mejores plantillas de la categoría. Recién descendido de Primera División, donde compitió el pasado año. Siendo lógicamente un principal para el ascenso. Para ello solo le vale la victoria en el Sardinero.
Si a ello unimos una real desunión en el equipo, entre la plantilla y equipo técnico, puesta de manifiesto en declaraciones, como la del Domingo de, Javi Castro, “Falta compromiso”; o las voces entre componentes en los desarrollos de encuentros, con malos gestos y voces, entre ellos, bastante poco amigables, tenemos un panorama desolador. Del que solo veo un culpable final usted. Don José Alberto. Ahora bien, entrenador, abogando a la suerte deseo, sueño diría, con clasificarnos y ganar el play off y jugar la siguiente campaña en primera división. Mimbres hay para ello, pero así no.